[En esta serie, Orando la Biblia, estamos tomando la idea que Donald Whitney promueve de orar las Escrituras y procurando hacértelo práctico al compartirte pasajes de la Escritura, una oración modelo y algunas preguntas guiadas para ayudarte a que puedas apropiarte de ello. La oración modelo te puede servir como ejemplo, o la puedes usar como una oración para ti mismo. Mientras pruebas un poco, no te preocupes si te sientes raro o no estás seguro de qué decir. Recuerda, el poder de la oración no viene de las palabras que decimos, sino de Aquel que las escucha.]
Escritura ejemplo
Proverbios 12:22: Los labios mentirosos son abominación a Jehová; pero los que hacen verdad son su contentamiento.
Oración modelo
Te alabo porque eres Yahvé, el Dios que hace promesas y las cumple. Siempre eres fiel y siempre veraz: no puedes mentir (Heb. 6:18). Gracias porque todas tus promesas son “sí” en el Señor Jesús (2 Cor. 1:20).
Señor, me entristece cuando mi hijo miente, cuando peca contra ti y contra su prójimo. Padre, me siento tan impotente para cambiarlo en esta área, y confieso que a veces me siento frustrado por no poder chasquear los dedos y darle labios limpios. Por favor, perdóname por la forma en que anhelo tener el control sobre el corazón de mi hijo, deseando ser “dios” en su vida.
Sé que eres poderoso para hacer lo que yo no puedo hacer: solo tú puedes salvar a mi hijo y solo tú puedes darle la voluntad de complacerte. Te ruego que hagas esto. Que mi hijo llegue a conocerte, Señor, Aquel que es completamente digno de confianza.
Como resultado, por favor, dale a mi hijo un odio justo hacia todo lo que sea contrario a tu carácter, incluida la falsedad. Que ame lo que amas y odie lo que odias.
Cuando haga algo malo, que el conocimiento de que Cristo ha pagado la pena máxima por el pecado le libere para no culpar a otros ni tergiversar la verdad. A medida que crezca, que esté tan seguro de tu amor por él que no sienta la necesidad de ganarse la aprobación de los demás con palabras mentirosas. Y en un mundo donde la gente usa sus palabras para tratar de desmantelar o distorsionar la verdad de tu Palabra, oro para que mi hijo hable la verdad acerca de ti con valentía.
Padre, por favor ayúdame, por tu Espíritu, a ser un modelo piadoso para mi hijo. Dame fuerza para decir con amor la verdad, incluso cuando sea inconveniente o incómodo. En mi maternidad, ayúdame a reflejar tu coherencia en mis propias palabras y acciones. Y protégeme de las tentaciones de exagerar o restar importancia a la verdad. Que mi hijo siga mi ejemplo mientras yo busco seguir a Cristo (1 Cor. 11:1).
Oro para que te imite, Padre Celestial, todos los días de su vida (Ef. 5:1). Que actúe fielmente en palabra y obra. Que el sacrificio de Jesús sea la razón por la que quiera hablar con la verdad. Y que esté entre aquellos en quienes te contentas por causa de Cristo.
Hazlo propio
Alaba a Dios: En este pasaje de las Escrituras, ¿qué cosas te dan razones para alabar a Dios y darle gracias por quién es Él y lo que está haciendo? Agradécele por algunas cosas, tanto generales como específicas, y entra a su presencia con regocijo.
Confiesa: ¿Qué cosas le tienes que decir a Dios acerca de cómo tu corazón o tus acciones pudieran (intencional o no intencionalmente) desviarse hacia la autosuficiencia o incluso la desobediencia? ¿Cómo has confiado en tu propia sabiduría o resistido a su presencia, mandamientos o cuidado?
Comparte tu corazón: ¿Qué cosas necesitas decirle al Señor que surgen de tu humilde preocupación? ¿Hay dudas que permanecen, preocupaciones que albergas, o cosas que necesitas entregar a Él?
Pide: ¿En qué área necesitas sabiduría, ayuda o gracia? Cuéntale al Señor dónde sientes tu debilidad y qué necesitas específicamente, dejando que Él tenga la última y perfecta palabra en cómo esas necesidades son suplidas y esas oraciones contestadas.
Este material fue preparado y publicado originalmente por el equipo de Risen Motherhood. Traducido, adaptado y publicado con permiso.
